Desparpajo, desfachatez, irreverencia, indecencia, falta de cultura o educación, por no decir de valores…
De todos éstos desafortunadamente sufrió en sus entrañas más profundas hace un rato, la gran ciudad, el país y el mundo en el que vivimos, de lo cual, me di personalmente cuenta al ver como un fulano con tales signos avanzados de actitud irreverente, nefasta y “Esquezofrénica”, tiraba al arroyo por donde circulábamos una caja vacía de alguno de sus múltiples aparatos electrónicos recién adquiridos. Lo hizo, sin la menor pena o respeto por el medio ambiente, por los automovilistas, los peatones o su “queridísima y adorada madre”, a quien con mucha tristeza de mí parte, le recordé en forma mental no muy atenta o amablemente.
Sacó la susodicha caja por la ventana de la gran camioneta verde con placas wwtt 90961k, en la que circulaba él, otro chafirete y un par más de risueños acompañantes, que al unísono aplaudieron, brincaron de gusto y hasta porras le echaron, por su espectacular hazaña citadina. Aventó la mencionada caja al piso o pavimento, sin inmutarse o pensar en lo que hacía, lógico, o sobre las posibles consecuencias de tal impensada acción. Incluyendo, al no circula que seguramente le afectará a él mismo, a sus igualmente e irresponsables inmorales cuates y a otros por estos rumbos, en un futuro no muy lejano. ¡Bravo, mentecato…!
Por otro lado, un caso con los mismos tintes irresponsables y “Esquezofrénicos” también de la gran ciudad, cada día veo a más automovilistas de todos tipos y tonos de piel, en sus pequeños o grandes bólidos de todos colores y tamaños, que manejan además de con las “patas” y con las manos ocupadas de sus teléfonos celulares, “texteando o hablando o cuchicheando o diciendo una sarta de pendej…” a no sé quién, sin pararse u “orillarse a la orilla” para hacerlo o en pensar las consecuencias de lo que hacen. ¡Han de estar hablando con Peñaranda o con Trumpeldor o a el Profe…” o a “Cantinflas” o con no sé quién, así de importante, que no pueden dejar de hacerlo mientras conducen! Insensibles e inconscientes del daño potencial que se pueden hacer a ellos o ellas mismas o a sus familias o a los pobres inocentes peatones o automovilistas o perros o a otros “Animales de dos o más patas” que tienen que circular, si pueden, cerca de ellos.
¡Ja, “pensar, deporte raramente practicado por nuestros rumbos”, ya que seguramente a todos ellos no les enseñaron nunca a hacerlo desde el “kínder”!
¿Y por qué no les enseñaron o aprendieron a hacerlo?
¡Pues porque lo más seguro es que fue a alguna de nuestras “avanzadas y modernas” escuelas del país! De esas a las que Andere no va por falta de presupuesto o tiempo… O porque seguido anda de viaje por Estambul, Copenhague, Transilvania, Tanzania, Damasco, Timbuktu o Yugoeslavia, estudiando las mejores escuelas del mundo. ¡Ah, y también en Chiconcuac el alto!
¡Sí, de esas dirigidas y administradas por huelguistas y manifestantes, como los que ahora diariamente viven, comen y duermen en sus nuevas tiendas de campaña, perfectamente acomodadas en las laterales de “Reforma” u otros lugares turísticos de la importante ciudad más contaminada o accidentada o insegura y ya no tan “transparente” del país! O…
¿Y que va usted a hacerle? ¡A aguantarse! Acuérdense de la vieja ley mexicana, una de esas que sí se cumple todos los días, incluyendo los festivos del: -“Agua y el Ajo…”
Pos nada… Ni modo de ponerse a discutir o pelear con tan mal educados o poco cultos, o “ESQUEZOFRENICOS” e indiferentes o inconscientes personajes. ¿Qué tal si se enojan y te sacan una pistola o te quieren pegar…? ¡¡Verdad…!!
O, como dicen los españoles oriundos de España, cuando hablan en un perfecto Español o Castellano de Castilla o Madrid o Barcelona o del viejo Toledo, ese que va con “ESSSE”: -“¡Vale…!”
“¡Vale…!”
“¡Ostia…!”
“¡Joder…!”
“¡Ja…!”